En plena madrugada, la desesperación de un padre que llegó a la Comisaría Octava con su hijo en brazos encontró una respuesta inmediata. El pequeño, de apenas dos años, no respiraba.
Sin dudar, el Oficial Pablo Sherrer inició maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) mientras se pedía una ambulancia al servicio de emergencias. Al ver la gravedad del cuadro, los efectivos decidieron no esperar: subieron al niño al móvil policial y emprendieron el traslado urgente hacia el Hospital Delicia Concepción Masvernat.
Durante el trayecto, el Cabo Primero Diego Rolón continuó las maniobras de RCP sin interrupciones. Gracias a su acción rápida y decidida, el niño llegó con signos vitales al hospital, donde el personal médico logró estabilizarlo y devolverle la conciencia.
Las primeras evaluaciones indicaron que el episodio habría sido provocado por una convulsión con principio de ahogamiento.
Gracias a la reacción inmediata y la vocación de servicio de los policías, una vida se salvó esta madrugada en Concordia.